viernes, 28 de diciembre de 2012

Ganache chocolate blanco

¡¡Felices Fiestas a todos!!


Hoy vamos a hacer "mi ganache" ¿por qué digo mío? Porque empecé con la receta típica que aparece en mil blogs y el resultado fue… ¡unas improvisadas trufas ideales!
Si metía la batidora de varillas en esa masa para intentar montar la mezcla, me iba a quedar sin varillas y sin batidora.
Así que fui haciendo pruebas hasta que di con este estupendo ganache… es el que más me gusta de todos los que he hecho hasta ahora :)

Los ingredientes:
- 75 g de chocolate blanco
- 250 ml de nata líquida para montar

Utensilios:
- Un cazo
- Un recipiente para poner la mezcla a enfriar y en el que podamos montar la nata
- Nevera
- Batidora con accesorio de varillas
- Boquilla de manga pastelera (os recomiendo metálica)
- Manga pastelera (opcional)
- Bolsas de congelar (opcional pero altamente recomendable)
- Espátula de silicona 

Primero:
En el cazo ponemos la nata líquida y el chocolate troceado, en este orden, si el chocolate toca el cazo antes que la nata se os puede terminar quemando y teniendo un gusto malo.
Ponemos el cazo a fuego muy flojo y le damos vueltas hasta que se deshaga el chocolate por completo, en ese momento ya podemos apagar el fuego.

Segundo:
Para que la mezcla sea homogénea, lo batimos en el mismo cazo con la batidora, no hace falta más de 30 segundos.
Ponemos la mezcla en el recipiente en el que la montaremos más tarde y lo metemos a la nevera.
Os aconsejo que pase toda la noche, aunque con unas horas puede ser suficiente, lo más importante para que la nata monte es que esté bien fría y su recipiente también.

Tercero:
Con la mezcla y el recipiente bien fríos, empezamos a montar la mezcla, paciencia, que no monta tan rápido como la nata sola.
La textura deseada es la que al poner el recipiente boca abajo no se caiga la nata. Tenemos que tener cuidado con no pasarnos, si nos pasamos se empezará a segregar la mezcla y tendrá un aspecto horrible.
El punto deseado sería este:

Cuarto:
Ponemos la mezcla en la manga pastelera o en una bolsa de congelar y la metemos en la nevera.
Mientras se enfría un poco más, sacamos nuestros cupcakes, los ordenamos como queramos y nos preparamos la mesa de trabajo, es importante tener espacio para que te queden bonitos e ir de uno en uno con calma.
Si hemos elegido la opción de manga pastelera, sacamos la mezcla de la nevera y ya podemos empezar a decorar los cupcakes.
Si hemos elegido la opción de la bolsa de congelar, a otra bolsa de congelar le cortamos una esquina y ponemos ahí la boquilla metálica (la de plástico hace dibujos feos con la nata), sacamos la mezcla de la nevera y cortamos también una esquina de esa bolsa, la ponemos haciendo coincidir la esquina cortada dentro de la boquilla y ya podemos empezar a decorar.

Quinto:
¿Hacemos el rosetón del centro hacia el exterior o al contrario? Eso va a gustos, a mi me gusta mucho más del exterior hacia el centro ¿por qué? Porque con una bolita/corazón/cualquier mini decoración puedes tapar el corte.

Sexto:
Si queremos poner algo encima del ganache, este es el momento, antes de que vayan a la nevera (al llevar nata los tendremos en la nevera –máximo 4 días- o los congelaremos).



Hasta aquí la entrada de hoy, espero que lo probéis y sobretodo que os guste :D

Besetes!!

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